27 de septiembre 2019
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La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) afirmó este viernes que el cierre de El Nuevo Diario, que este 27 de septiembre ha anunciado la cancelación de sus ediciones impresa y digital, es "una vergüenza para Nicaragua y para el mundo libre" y responsabilizó a "la presión de un Gobierno autoritario".
En un comunicado emitido en Miami, donde tiene su sede, la SIP reaccionó al anuncio hecho por el diario nicaragüense fundado en 1980, que abarca también a otros dos periódicos, Metro (de circulación en Managua) y Maje (digital), que pertenecen a la empresa Editorial Nuevo Amanecer, cuyo propietario es el grupo financiero Promerica, de capital nicaragüense.
La editorial afirmó que decidieron detener sus publicaciones, en impreso y digital, porque las dificultades adversas que afrontan "hacen insostenible su funcionamiento".
Última portada de Metro, este 27 de septiembre, en Managua. // Foto: EFE
El Gobierno de Daniel Ortega, a través de la Dirección General de Aduanas, mantiene retenidos desde hace un año el papel, tinta y otros materiales a Editorial Nuevo Amanecer, así como al Grupo Editorial La Prensa, que distribuye el diario La Prensa y Hoy.
María Elvira Domínguez, presidenta de la SIP y directora del diario colombiano El País, expresó que "con el cese de la publicación de El Nuevo Diario se apaga una nueva voz, producto de la política represiva del régimen de Daniel Ortega para castigar a la prensa".
El Nuevo Diario ya había iniciado medidas para enfrentar el desabastecimiento de su materia prima y desde diciembre pasó de tener 38 páginas a únicamente ocho solo de lunes a viernes.
También se ha visto afectado el Grupo Editorial La Prensa que publica el diario La Prensa y Hoy.
Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP y director del portal mexicano de noticias La Silla Rota, agregó que "los representantes de medios, periodistas, organizaciones periodísticas y todos aquellos vinculados a la industria de la prensa, debemos enfrentar unidos el ataque de gobiernos autoritarios que desprecian la prensa libre e independiente".
Domínguez y Rock integraron en junio una misión de la SIP que visitó Nicaragua por segunda ocasión en menos de un año.
En esa oportunidad, tras saludar la liberación de los periodistas Miguel Mora, Lucía Pineda y Marlon Powell Sánchez, la SIP deploró la escalada del "clima de represión y hostigamiento" contra la prensa independiente y pidió que se autorizará a Aduanas a entregar los insumos cuyos derechos aduaneros habían sido pagados sin demora por las empresas editoras.
Los directivos de la SIP adelantaron que, en su Asamblea General en Miami, que se celebra del viernes cuatro hasta el lunes siete de octubre, abordarán a profundidad los problemas que afectan a la libertad de prensa.
En el comunicado se enumeran la violencia contra periodistas, proyectos de ley y la estigmatización, entre otros mecanismos utilizados por el poder político y los enemigos de la prensa para atacar a los medios.
La SIP es una entidad sin fines de lucro dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión en las Américas, que está compuesta por más de 1.300 publicaciones del hemisferio occidental.
