Con furia patriótica

El boxeo volvió a estremecer el terruño la noche del sábado 23, ofreciéndonos un espectáculo hincha-corazones. El nicaragüense René Alvarado apareció en pantalla con los colores azul y blanco, que tanto estímulo inyectan, y cobijado de una exuberante confianza, exhibiendo una formidable arquitectura pugilística, impulsado por una furia patriótica, se convirtió después de siete rounds, en una nueva realidad en el boxeo mundial tan necesitado de guerrilleros como él. René, el gemelo de Félix –también actual miembro de la realeza entre las cuerdas-, es el nuevo Campeón Mundial Superpluma AMB, después de obligar al mexicano-estadounidense Andrew Cancio, ampliamente superado en todos los aspectos de un agitado combate y cortado en la ceja izquierda desde el tercer asalto, a no salir por más sufrimiento en el octavo asalto cuando ya todo estaba escrito. En ese momento, en Indio, California, rodeado de una multitud admirada por su boxeo, René Alvarado escuchó el sonar de los claros clarines.

Desde el primer tañido de la campana, el ataque de Alvarado fue insistente, dañino y metódico. Y así continuó. Nunca vaciló mientras mantenía una presión intensa sobre Cancio, disecaba sus posibilidades y sepultaba poco a poco sus esperanzas de seguir siendo Campeón. El peleador pinolero que en diciembre del 2015 había perdido con Cancio al suspenderse el combate en el octavo asalto, mostró un gran crecimiento, y sobre todo, una combinación perfecta de resistencia tan granítica como la de éste pueblo en pie de lucha, y agresividad sin tregua, no soltando la iniciativa, y a ratos no permitiéndole respirar al adversario que desesperadamente, buscaba como encontrar alguna solución…Cada atrevimiento de Cancio era frenado, incluso el realizado en el quinto round, con una llamativa propuesta de cambio de golpes después de abrir con una potente izquierda y agregar un par de derechas, que hicieron ver en peligro al nicaragüense. Temerariamente sin pérdida de tiempo, Alvarado recortó más los espacios, desplegó golpes ascendentes y retomó las riendas. Su cierre con golpes de derecha, despejó cualquier duda en ese asalto.

Ambicioso a la hora de las bofetadas y con mucha mecha, Alvarado se empeñó en atacar y atacar sin dar tregua, sacando siempre las manos, consiguiendo la distancia apropiada para prevalecer, dándole forma tanto peleando afuera como adentro, a combinaciones de golpes que inutilizaron a Cancio pese a la multiplicidad de esfuerzos, que no ocultó su falta de recursos. No es un peleador capaz de aplicar variantes para resolver ecuaciones y eso lo hace muy previsible, lo que supo aprovechar el nicaragüense round tras round para establecerse y pelear con serenidad…Los asaltos corporales de René, no solo drenaron la energía de Cancio, sino que carcomieron su dureza mental, reduciéndolo drásticamente. Intentó el Campeón ir a fondo en el sexto, pero fue algo fugaz. Alvarado aquietó el combate, impuso la distancia que le convenía con su izquierda estirada y regresó a sus combinaciones y movilidad sin excederse. En el séptimo, el nica abre con dos izquierdas y mantiene la derecha atenta, mientras gira impidiendo que Cancio, atrapado y sin salida, se atreva a volcarse, sintiendo como la sangre continuaba saliendo del corte. Una mano milagrosa, era improbable, y en su último esfuerzo, Cancio recibió tres arponazos de derecha. No tenía sentido insistir porque todo estaba consumado…¡Cómo estimula vestir de azul y blanco! Te galvaniza, te purifica, y puede llevarte a cualquier proeza. ¿No es así René? Ya lo comprobaste.