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Obispo Báez: nunca más usar las “turbas”

Movimiento 19 de abril de estudiantes del UPOLI demanda justicia: “procesar y castigar a la cúpula policial”

Expresiones en la marcha multitudinaria del 23 de abril, en Managua. Carlos Herrera | Confidencial

Iván Olivares

25 de abril 2018

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La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), aceptó la invitación de Daniel Ortega para servir en calidad de “mediador y testigo” del diálogo nacional que el gobierno de Daniel Ortega se vio obligado a aceptar ante la presión de los estudiantes que enfrentaron la represión desatada por el oficialismo, que ha dejado más de veinticinco muertos, mientras  decenas de miles de ciudadanos siguen protestando de forma cívica en las calles del país.

Pocos minutos después, Ortega, acompañado de su esposa y vicepresidente, Rosario Murillo, leyeron una carta enviada al cardenal Leopoldo Brenes, presidente de la CEN, así como al resto de obispos que la conforman, en la que señalaban que “hemos recibido con mucho reconocimiento y respeto, su mensaje al pueblo nicaragüense, expresando su decisión de acompañar el proceso de diálogo que estamos instalando en el país”.


En realidad, la ‘invitación’ de Ortega fue un prerrequisito que sí impuso la CEN, como una forma de alcanzar legitimidad, viniendo del mandatario, de modo que no se pudiera cuestionar su participación en el mismo.

Los obispos dijeron que “para facilitar el clima de diálogo, consideramos esencial e imperativo que tanto el gobierno como cada miembro de la sociedad civil evite todo acto de violencia, de irrespeto a la propiedad pública y privada, y prevalezca un clima sereno y de absoluto respeto a la vida humana de todos y cada uno de los nicaragüenses”. Y pidieron que “los diversos hermanos nicaragüenses enfrentados dolorosamente, y la sociedad civil, nos acepten en carácter de mediadores y testigos”, por lo que quedaron “a espera de su respectiva aceptación”, sin especificar a qué sectores de la sociedad civil se referían.

Mientras tanto, el obispo auxiliar de Managua Silvio Báez, uno de los miembros de a comisión mediadora que además integran el cardenal Brenes y los obispos Rolando Alvarez de Matagalpa y Bosco Vivas de occidente, dijo en una entrevista a CNN que para lograr condiciones óptimas en el diálogo nacional, se necesita una Comisión de la Verdad que investigue los crímenes de la represión, que los responsables sean llevados a la justicia, y que el Presidente se comprometa a nunca más usar a las turbas de matones para reprimir.

Obispo Báez: diálogo no es pacto de cúpulas

Al constatar el carácter sangriento de la represión, Báez dijo al periodista Camilo Egaña que “para que el diálogo se desarrolle con éxito, Ortega debe asegurar que “nunca más van a volver a aparecer en las calles de Nicaragua estos matones progubernamentales con armas destructivas, que se enfrentan a la sociedad civil y yo espero que esto el presidente de la República lo asegure y lo haga público; porque si no hay estas condiciones, el diálogo corre el riesgo de fracasar”.

El periodista preguntó quién es el responsable de los grupos paramilitares y el obispo respondió: “lamentablemente es un método aberrante, repugnante el que ha usado este gobierno para reprimir a la población civil que protesta pacíficamente. Estos matones progubernamentales, te puedo asegurar, por lo que he visto, son dirigidos, muchas veces protegidos por la Policía”, denunció el obispo auxiliar de Managua.

El obispo advirtió que “El diálogo es un riesgo grande para toda la nación y la Iglesia” pero la Conferencia Episcopal está dispuesta a correr ese riesgo “que podría ser una estratagema del Gobierno para ganar tiempo y para alargar la situación marcada por el autoritarismo, la inconstitucionalidad, el irrespeto a los derechos humanos, la ilegalidad. Este diálogo tiene que tener como objetivo la democratización de Nicaragua”, destacó.

Monseñor Báez no mencionó la fecha del inicio del diálogo y sus participantes, pero resaltó que “deben participar todos los sectores, sobre todo, un diálogo que sea transparente; donde no haya más arreglos de cúpulas, no más pactos debajo de la mesa”.

Sobre la empresa privada, el obispo explicó la relación que esta había tenido con el gobierno durante la última década. “Todos ya hemos dicho varias veces que este diálogo llamado de consenso, este modelo, un día se iba a agotar. Yo siempre he dicho esto, los que están en estos diálogos son dos grupos económicos: uno que es rico y el otro que tiene el poder. Iba a llegar el día en que iban a entrar en conflicto y ya llegó el momento”, dijo.

Estudiantes: castigar a culpables de crímenes

Los estudiantes de la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), integrantes del  Movimiento 19 de Abril, exigen la destitución y el proceso judicial para toda la cadena de mandos policiales involucrados en la muerte de más de treinta personas

Los estudiantes los responsabilizan como autores de la represión y exigen la suspensión de “Francisco Díaz, comisionado general y subdirector general de la Policía Nacional; Aminta Granera, primera comisionada; Vladimir Cerda, comisionado mayor jefe del Distrito I; Noel Cruz, jefe del Distrito V; Juan Valle Valle, jefe de patrullas de Managua; Sergio Gutiérrez, segundo jefe de la Policía de Managua; Donald López, jefe del Distrito II, y Félix Villarreal, del Distrito VI

Además de pedir la destitución de los mandos policiales, los miembros del Movimiento 19 de abril demandan que el proceso judicial de estos funcionarios sea verificado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA y los organismos de derechos humanos nicaragüenses.

“Pedimos el retiro inmediato de la Policía a sus funciones verdaderas, que son para servir al pueblo… el cese de la persecución policial a dirigentes estudiantiles y ciudadanos en general. Anular los antecedentes policiales creados a todas las personas de la sociedad civil que han sido detenidas en actividades de protesta”, dice la proclama.

Preparan mesas temáticas con transparencia

Aunque en este momento no hay fecha para la realización del diálogo, se han realizado sondeos con algunos potenciales actores y participantes sobre la metodología a utilizar y las condiciones para cómo garantizar plena transparencia

Fuentes vinculadas a los actores del diálogo revelaton que el diálogo funcionaría con un esquema similar al de la Asamblea Nacional, con comisiones que discuten los temas específicos de cada sector, y presentan sus conclusiones a un plenario que las acepta, rechaza o modifica.

Álvaro Vargas, presidente de la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (Faganic), dijo que no se conocen los nombres de todos los integrantes de cada mesa o sector, y que aún hace falta confirmar una metodología funcional para que este diálogo arroje resultados a la mayor brevedad posible, porque “no se puede estar dialogando eternamente”.

Dado que muchas de las decisiones que se tomen requerirán de aprobar, derogar o modificar leyes de la República, los acuerdos tomados pasarían a la Asamblea Nacional, en el entendido de que, como el diálogo solo tomará decisiones por consenso, no debería haber atrasos para que el Poder Legislativo –que en esta coyuntura está subordinado a Daniel Ortega- cumpla con su parte del trato.

¿Quiénes serán los actores?

En este momento, se ha identificado al menos seis sectores que ya formarían parte del diálogo nacional. El principal actor del diálogo, que es la fuerza emergente del movimiento estudiantil, aún no conoce cómo definirá su representación ni cuantos miembros integrarán su delegación

Los otros seis sectores estarán coformados por representantes del sector privado, los trabajadores y organizaciones sindicales, la academia y las universidades, las organizaciones de la sociedad civil, y el Gobierno.

En su mensaje de respuesta a la Conferencia Episcopal, la vicepresidente Murillo dijo que “compartimos plenamente su propuesta de sectores que podrían participar en el diálogo nacional y agregaríamos otros que consideramos importantes”, sin especificar cuáles.

Aún no se conoce quién encabezará la represemtación del gobierno, mientras el movimiento estudiantil 19 de abril dijo en una conferencia de prensa, que su meta es que “Daniel Ortega salga del poder”.

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Iván Olivares

Iván Olivares

Periodista nicaragüense, exiliado en Costa Rica. Durante más de veinte años se ha desempeñado en CONFIDENCIAL como periodista de Economía. Antes trabajó en el semanario La Crónica, el diario La Prensa y El Nuevo Diario. Además, ha publicado en el Diario de Hoy, de El Salvador. Ha ganado en dos ocasiones el Premio a la Excelencia en Periodismo Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, en Nicaragua.

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