7 de abril 2022
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Para Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en Nicaragua “la libertad de prensa ha naufragado totalmente”, y advierte que, a corto plazo, tal situación “no va a ser posible de revertir”, porque con la reelección de Daniel Ortega y Rosario Murillo vendrá “más represión, menos libertad y más persecución del periodismo”.
Aseguró que la condena de nueve años de prisión contra el gerente general del diario La Prensa, Juan Lorenzo Holmann, es “totalmente ilegal y muestra la desesperación del régimen Ortega-Murillo para enfrentar a todo aquel que se anime a expresar una disidencia”.
En entrevista con el programa Esta Noche, Jornet señaló que la confiscación y allanamiento de las instalaciones de La Prensa, de agosto de 2021, “va en contra de todos los estándares interamericanos en materia de libertad de prensa y a los principios de libertad de expresión”, y también “es una decisión clara de terminar con todo atisbo de periodismo independiente”.
Holmann —vicepresidente regional de la SIP— fue condenado por la jueza orteguista Nadia Camila Tardencilla, por supuestamente cometer el delito de lavado de dinero, aunque la defensa del preso político aseguró que la Fiscalía no logró probar la comisión del delito. En la sentencia, la justicia del régimen impuso una multa económica de más de tres millones de dólares, la inhabilitación del ejercicio de su profesión y la custodia policial sobre los bienes ocupados en La Prensa, ejecutando una confiscación ilegal de ese medio de comunicación.
La justicia plegada al régimen Ortega-Murillo condenó a nueve años de cárcel al preso político Juan Lorenzo Holmann, gerente general del diario La Prensa, ¿cómo valora la SIP esta nueva condena?
Es una medida totalmente ilegal que muestra la desesperación del régimen para enfrentar a todo aquel que se anime a expresar una disidencia, sean periodistas, dirigentes de la oposición o dirigentes sociales. Es una escalada que se remonta ya a bastante tiempo atrás, pero que en septiembre de 2020 comenzó a acelerarse con un proceso de una serie de leyes que fueron cimentando el camino.
A partir de mayo, justamente con el allanamiento a CONFIDENCIAL y a los estudios de televisión que ahí funcionaban, se aceleró bruscamente el apresamiento de los principales candidatos de la oposición, para que las elecciones pasaran a ser una máscara solamente.
Con la detención de Juan Lorenzo, que además es nuestro vicepresidente regional, desde el primer momento levantamos nuestra voz de alarma y alerta. Hemos realizado una visión virtual de Nicaragua para revisar el estado de la libertad de prensa y mantuvimos reuniones con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con otros organismos. El próximo 19 de abril vamos a realizar un panel o una mesa redonda, donde familiares de los detenidos políticos van a comentar la realidad que padecen, porque el régimen no solo se ensaña con aquellos que expresan su disidencia sino con familiares y amigos, tratando de acallar toda voz crítica.
La sentencia judicial contra Holmann se extiende a los bienes y a las instalaciones de La Prensa, el único periódico del país, que está tomado por la Policía desde agosto del año pasado, ¿cómo valora esa ocupación policial de un medio de comunicación?
Claramente va en contra de todos los estándares interamericanos y también a nivel global en materia de libertad de prensa. El allanamiento, la confiscación de un medio de comunicación o cualquier material para el trabajo periodístico es totalmente contrario a los principios de libertad de expresión y, en ese sentido, creemos que es una decisión “presuntamente judicial”, digo presuntamente porque la justicia en Nicaragua está totalmente controlada por el régimen, y es simplemente una herramienta más del poder para perseguir a la oposición política y a la prensa libre, a lo cual no le vemos ningún viso de legalidad, sino, por el contrario, es una decisión clara de terminar con todo atisbo de periodismo independiente.
Con este serían ya tres los medios en Nicaragua confiscados por el Gobierno; uno de ellos es CONFIDENCIAL y el otro 100% Noticias, ¿qué nos dicen estos hechos sobre la libertad de prensa en Nicaragua?
Nosotros tenemos un índice, el índice de Chapultepec, que mide una serie de parámetros para evaluar la libertad de prensa en los países del continente. Nicaragua está, lamentablemente, en el pelotón que encabeza el lado de abajo, junto con Cuba y Venezuela, países donde no existe la libertad de prensa, la libertad de expresión. Creemos que esto no va a ser posible de revertir a corto plazo, porque, con la última reelección el matrimonio Ortega-Murillo, se han consolidado en el poder. Creo que lo que viene, si no hay una reacción firme de la comunidad internacional, es más represión, menos libertad y más persecución del periodismo.
Con Juan Lorenzo Holmann ya son seis los condenados por su actividad relacionada al periodismo ¿cómo califica esta situación y cómo se compara con el resto de países de la región? ¿hay casos similares?
Evidentemente hay muchos Gobiernos que intentan enfrentar o confrontar al periodismo, pero son pocos los países, afortunadamente, donde ese enfrentamiento llega a niveles tan desembozados como los que practica el régimen orteguista, con una justicia que en realidad solo hace un simulacro de juicio, porque muchas veces los detenidos ni siquiera pueden tener contacto con sus abogados, o los abogados pueden tener contacto con el expediente muy sobre la fecha de inicio del juicio, donde los juicios son a puerta cerrada, donde se realizan rápidamente sin exhibir claramente las pruebas. Esto mismo que pasa en Nicaragua ocurre desde hace años en Cuba y pasa también en Venezuela; entre esos tres países la libertad de prensa ha naufragado totalmente y realmente no se puede ejercer un periodismo con libertad, que promueva el debate ciudadano o el buen funcionamiento del Estado. Entonces, eso lleva a menos institucionalidad, menos democracia, lleva un régimen mucho menos democrático, que es lo que se está viviendo en Nicaragua, con un barniz de democracia porque se realizan elecciones, pero son elecciones totalmente amañadas, donde la oposición no puede presentar sus candidatos de forma libre y donde ha habido un altísimo nivel de abstención porque mucha gente descree de las elecciones y lo hace con justa razón.
Mencionaba que habrá una reunión en que van a invitar a familiares de los presos políticos, ¿cuál es el objetivo?
Mantener vivo el tema de Nicaragua a nivel internacional, que las agencias de noticias internacionales vuelvan a interesarse, no decimos con esto que se hayan olvidado de Nicaragua, pero evidentemente hay muchos temas a nivel global que están demandando atención; la invasión de Rusia contra Ucrania, pero temas como los de Nicaragua deben estar permanentemente en la consideración pública.
Estamos pidiendo también que se sancione al Gobierno de Nicaragua con el no otorgamiento de préstamos que no sean estrictamente humanitarios, porque en la medida que sigan teniendo financiamiento internacional, los regímenes se consolidan, van tomando el control legislativo, judicial, y todo el resto de los órganos de control, y cuando hay una oposición desmantelada, porque muchos dirigentes políticos han tenido que huir del país o fueron encarcelados, es muy difícil que pueda por la vía democrática recuperarse la ciudadanía, la institucionalidad.
